Via El Mundo
Por Pablo Herreros
26.05.2014
No son tiempos favorables para la filantropía. Los robos a gran escala
desde las más altas esferas del poder, los recientes engaños políticos, las
corruptelas varias, y hasta los asesinatos nos trasladan una imagen negativa del
ser humano y hacen difícil ver una realidad contrastable: nuestra especie ha
sido y es una de las más cooperativas que existen en el planeta Tierra. Pero, ¿y
si toda esta agresividad y mentiras fueran sólo una pequeña parte de la
historia? ¿Y si algunos árboles tóxicos no nos dejaran ver el maravilloso
bosque?
Continua.