Por Javier Salas
15.02.2013
Apenas conocemos el 1% de los objetos espaciales que podrían ser un peligro. La astronomía amateur se ha profesionalizado para ser decisiva en el descubrimiento y seguimiento de los que podrían chocar contra la Tierra
Recreación del paso de dos asteroides junto a la Tierra. / ESA |
Anoche, mientras todos los astrónomos de todo el mundo realizaban meticulosos ensayos con sus equipos para perseguir hoy al asteroide 2012 DA14, descubierto por el granadino observatorio de La Sagra, otro viajero espacial se nos acercaba por la espalda y nos pillaba desprevenidos, hiriendo a cientos de personas cerca de los Urales, en Rusia. No es extraño, si atendemos a las cifras: se calcula que hay más de medio millón de asteroides como estos surcando nuestra órbita, de los que se han catalogado 9.600. Son los denominados NEO (objetos próximos a la Tierra, por sus siglas en inglés), de los que habríamos descubierto en torno al 1%. De los conocidos, apenas 362 se consideran probabilísticamente peligrosos, aunque sea de forma remota, según la Agencia Espacial Europea (ESA). Recientemente, la NASA hizo una especie de recuento: existirían unos 4.700 asteroides peligrosos por ser mayores de 100 metros de diámetro, de los que tenemos localizados al 20%-30%. De alertar de su llegada se dedican, en la medida de sus posibilidades, organismos relativamente recientes creados por la NASA y la ESA. Pero también miles de aficionados que pasan las noches mirando al cielo, a través de sus portátiles, para alertar de sus peligros.
Algo así sucedió en las primeras horas del 23 de febrero del año pasado, cuando el equipo de Jaime Nomen, del Observatorio Astronómico de Mallorca (OAM), detectó un objeto desconocido que sería catalogado como el asteroide 2012 DA14 y cuya órbita le convierte en un potencial peligro para los habitantes de la Tierra. Esta noche, ese asteroide peinará el flequillo de nuestro planeta, acercándose hasta unos 27.700 kilómetros sobre Indonesia, mucho más cerca que nuestros satélites geoestacionarios artificiales, que orbitan 35.000 kilómetros por encima del ecuador. Nunca antes de había calculado el paso de un objeto de este tamaño tan cerca… sin golpearnos. Desde La Sagra ya han detectado 64 objetos y ocho cometas. CONTINUA!